Tu guerra

Te prometíó el cielo cortandote las alas.
Sus palabras hirientes te dolían como balas.
Se iba y como si nada volvía y te reconquistaba.
Mucho tiempo sin escape, sin chalecos antibalas.
Cuál francotirador, hábilmente te encontraba.

Frío, calculador, casi nunca le escapabas.
Siempre que apuntaba a tu corazón llegaba.
Y mientras huias le dejabas tus huellas
Gatillo fácil al corazón que aparecía con mas mellas.

Fue tu guerra perdida , la que no sabías terminar.
Siempre en desventaja y ya no dabas más.
En el día lucías tu sonrisa habitual,
pero al llegar a la noche volvías a sollozar.
Por más lejos que estuvieras te reconocía a mil leguas.
Y ya con el corazón en la mano le pedías otra tregua.
Ya sin recursos ni estrategias.
Un día izaste tu bandera blanca.
Después de mil batallas y dos mil lagrimas en las cartas.

Una derrota así no será fácil olvidar.
Te costó priorizar entre una guerra perdida o una incierta paz.

Nadie sale bien parado de una guerra que no espera.
De un aliado íntimo que te traiciona y destroza con tus fronteras.
Pero tus ojos van a brillar. Ya no van existir tus ojeras..
Tu sonrisa va a ser natural y esconderá felicidad verdadera.

Ese inerte francotirador hoy todavía sigue en sus guerras.
Pero ya se ha cansado de escondites y trincheras.
Reconoció a su enemigo mortal, frente al espejo lo espera.
Le tira a matar , quiere dejarlo en la tierra (A.L)