Señora mía...
Señora mía con alas doradas
como una alevilla apoyada en una rosa,
versos de felpa para ti mujer hermosa;
flor rociada por sentimientos dormidos,
amodorrados por el tiempo
Señora dueña de mi vida,
cleptómano de mis pensamientos,
su agraciado perfil que me devora;
mujer prohibida chispa divina
pupilas que me miman y me abrigan
Mis luceros lloran al ver te
del brazo de tu hidalgo,
amada quisiera decirle algo:
¡Que linda te ves con ese vestido largo!
Anhelo ver clavado tus ojos de encanto
en mis ojos desesperados
Sentir tu fragancia a mi lado
como hace algunos años;
melodía de enamorados
corazón afortunado
Señora mía usted siempre será,
mi somnolencia en secreto oculto,
sin rencilla, sin orgullo y sin resalto,
en las madrugadas el será dueño
de tus besos y de tus caricias,
tú lo amaras con locura
Con pasión contenida
salida de clara realidad,
el nunca sabrá que era a mí,
a quien amabas en su almohada;
pensamiento revoloteando
haciendo nido en mi regazo
Señora mía en sus labios
están prendió mis besos como un lazo,
yo siempre viviré en su halda,
en sus noches de luna vera mi faz,
calor de la distancia que te angustia
Amor con sabor a miel,
delicia que roza mi piel;
señora romance eterna amante,
novios exigentes arte de adolescentes
Copyright, “©”, la obra está sujeta al derecho de autor
Conoce más del autor de "Señora mía..."