Navegando lejos

Se me han apagado hasta los latidos,
este mar esta desabrido y tibio,
soy una ceniza de un poema echo humo,
un tiburón perdido en el cielo.

nada tiene lógica en esta brújula,
soplan las velas de mis tortas
cumpliendo condenas de cadenas con gusto a lúcuma,
me petrifica la sal y el viento de las prosas.

u

n poeta consumido por sentimientos confundidos,
sigo muerto pero a la vez vivo,
un cadáver que camina arrastrado por el destino,
estos hilos cortan hasta mi dolor.

sufrir es vivir, escribir es existir,
borrar mis huellas es solo huir
de un pasado que me quiere consumir,
destilado soy el veneno que glorifica al mártir.

sin remos, timón ni mástil,
sigo aquí con el peso de un ancla de marfil,
puro y cotizado por mas de un imbécil,
soy un trofeo afilado y ágil como un alfil.

atravieso el agua a toda velocidad
rompiendo iceberg y olas,
adentrándome en la oscuridad
que se esconde debajo de las hojas y botellas.