Mirada

...
Déjame trenzar tus orejas con los días
hacer [nos] espuma
vivir en la plaza pública:
hallar por el costado marítimo del árbol
un izo de sangre:
un lejano oriente de vela:
buscar una moneda
en el puerto trizada al sol.
Haré un inmenso huracán de pétalos

enredados con tus días:
pajarerito de ísimos
de grandes barrancas y grandes estaciones:
vuelas en cada esquina
galopas en los cuatro cardinales
al mismo tiempo que cantas y trinas
Con tus silencios
figuraré una huella de alguna tos
y te [nos]veré de costado:
con tus palabras de átomo
explotaré en la inmensidad de la luna
y la romperé de una pedrada:
nosotrosdós solo supimos ser:
estar sobre la hierba
entrelazar las manos como puentes:
ahora ya en el sur tú:
yo en el norte:

¿hundimos el navío lleno de carnes abiertas?

A contraolvido nos olvidamos
y recorremos el territorio amplísimos:
nos dejamos gravísimos:
con tan solo un puñal y una carcajada:
no supimos que no iba a haber más días.

II

por mi imposibilidad de héroe
duermo: ya el año próximo me despierto
y te acurruco: y me veré dentro de tus [mis] ojos:
un pez de olvido:
una resma a prueba de agua de mar: sal
de acuario submarino

quisiera ir con mi licor tenue
donde el viento me palpe la cara: donde
sea capaz de hundirme, donde allá
toque el fondo del qué
del todo, de ti, del alma: de la huida hacía mí [ti]

anochéceme despacito
quedito, con rabia maternal de un hijo no deseado:
hiérveme
en los días de asueto: cobíjame puro e inerte:
voy tras tu espalda
como armando una revolución social:
una mueca andina, una piedra de sol:
un ir y venir [en nosotros] reclinados:
quisiera deshundirme y vaciar
el pozo de la lágrimita:
cerrar mi nido en tu carretera
o aplastar mi corazón con tu manito dorada:
ser innumerable:
mandar mis huesos como en un correo:
cerrar el cielo y la lluvia: encontrar mi carne
en tu carne, disuelto y hasta enamorado
Y es que mi alma está en bulto
húmeda y contrarrevolucionaria:
toma agüita de tu cadera y mi boca:
todo lo que toco es de una terquedad permanente:
quisiera que desdeayer
resbalases tú en mí y yo en todo:
que desde ayer
nos encontremos uno metido en el otro:
pasando la tarde a la postarde-noche:
posando nuestro cuerpo
como vela en medio de algún país chiquitito:
yéndonos transparentes
lamiéndonos tus mis pestañas
y yo [con mi índice] tus pies:
todo con la paz de Chimborazo: azotando
algo diminuto contra la memoria:
dando la bendición a las hormigas, amor
todo, todo, todo
desde tu frente