La bella dama

La Bella Dama

Cierro mis ojos
solo por un instante
que vuela intrépido ,
corre asustado por su brevedad,
por lo efímero de su existencia.
La misma vieja canción
la misma bella dama
que flota sobre mis sueños

con su celestial palidez
y viene sobre mi
con su eterna verdad
con prontitud se acerca,
y luego se va
solo en recuerdos,
a la bella dama,
puedo tocar.

Mil preguntas me vienen entonces ,
no encuentro respuesta para ninguna
y la vida se pasa y los momentos se escapan,
y solo somos eso,
preguntas sin respuestas
piedras rodandando,
montañas sin escalar.
En la cima , donde camina
la misma bella dama
que me saluda, inalcanzable, vengativa,
y su risa inolvidable
que vuelve a convertir todos mis sueños
en realidades.
Se que algún día otra vez sus
labios besaré
su resplandor, su brillo tomaré
será ese el amor eterno?
es eso lo que realmente se siente?
como correr en contra de viento,
cabalgar sobre la tormenta,
no creer en ráfagas, ni en lamentos.

Me despierto en el mismo bar,
en ese lugar olvidado,
la banda desafinada
toca la misma vieja canción
que oigo pero no entiendo,
la gente habla a mi alredor
pero no las escucho,
la botella de vino sigue llena,
de mas sueños y más dudas,
me toco,
y la luz del amanecer nubla mi vista,
y la silueta de la bella dama,
sigue ahí, todavía distante,
Quien soy, ?
sigo siendo el mismo
en este mundo errante.

Quien supiera alguna respuesta,
Quien me susurraría alguna verdad ,
aunque sea mentira,
porque es como perder mi credo
y la bella dama se ríe de mi
desde su pedestal de roca,
a veces oscura , fría,
otras perfecta,
y yo sigo sin poder decirle porqué
extrañamente ,
la sigo amando.