Aliento de vida

Mi sangre fluye por la tierra
Alimentando el volcánico corazón
De la naturaleza;
Y que brota para dar a luz
A las flores muertas
Que moran bajo mi puerta.

Son flores que incitan
Un futuro marchito
Y que en sus pétalos habita

El colorido sufrimiento:
Ese estado en que el tiempo
Viaja huyendo de la nada
Dejando su huella
De la que nace la existencia
Como maldición de todo
Lo que crece de su planta
Marcada sobre la tierra.

El tiempo huye despavorido
Sin importarle lo que deja
A su paso;
Es la huella que da lugar
A un ser maldito
Que obligado a vivir
Terminará muerto.

Los animales nacen
De las flores que escapan
De mi sangre que
Por la tierra fluye
Dando vida a los seres
De los que tendrán
Que alimentarse
Aquellas almas
Perdidas en el zar
De un cruel destino
Que con el tiempo
Pasa sin tenernos piedad:
Destruyéndonos
Al final,
De la misma forma,
Cruel y despiadada,
En que el tiempo
Se atrevió
A pisar la tierra
Dejando una huella
Cruel y dolorosa
Robándole el aliento
A la naturaleza
Para crear maldita
Vida pasajera
De su libertad eterna.

Y cuya vida
es la condena
De los que merecemos
Sufrir por las
Flores muertas
Que nos representan
En su jardín de recuerdos
Que el destino
Se ha encargado
De recordádselo
En todo momento
A su cruel hermano
El tiempo
Para torturarlo:
¡Maldito!