Te vas.

Te vas.

Te llevas los miles de recuerdos,
los instantes de alegría
y los segundos de amor,
que no pudiste dar.

Dices que te vas, pero para mí
te quedas, en los besos
que no se pueden borrar,

El equipaje que llevas es pesado,
Dicen que los recuerdos pesan
y eso hoy lo puedo comprobar.

En tus maletas has empacado
las noches y madrugadas
en que te amé, aquella ropa
que usaste en nuestras ocasiones
especiales.

Empacaste todos los sueños y
desilusiones, las sonrisas fingidas
y los tantos amaneceres en los
que te esperé.

Te vas de estas paredes,
pero en ellas se quedan
el eco te tu voz.

Te vas y estas madrugas
sin ti ya son eternas,
te vas, pero te dejo la
puerta abierta, por si
olvidaste el resto de equipaje que me dejas.