Sus Pasos

Paso habitual de alborada
que con trinos y jaranas,
la chiquilla es recibida.
Pies y manos va mojando
con las gotas del rocío
acogiendo sus delicias.

En exquisita cadencia
y leve paso, tritura hojas
olvidadas por el viento.

Abejas, mariposas
a su lado coquetean,
al igual que la moza compiten,
por halagar a capullos.

A cada flor,
dan mimos y caricias
así, cotidiano andar,
así, diario regocijo.
Canarios y jilgueros,
emulan en algaraza
exponen finos trinos.

Vigilante cenzontle,
observa, en crespa del encino.
Jubiloso ruiseñor, curiosea,
trepado en el espino.

Todos, en unísono
por su adorada chiquilla.
En deleite, pulcra rosa
se le ofrece a delicada
y tersa mano. A su vez,
el nardo se desvive
por ser él, el elegido.

Más, el jacinto, se muestra
muy altivo. Dalia ofrece
afable gesto en perfecta parsimonia.
En continuo y suave paso
la gardenia, recibe tierno beso,
se digna a ofrecer grato aroma placentero.

Al final del sendero,
en fuente tranquila
sus pies se detienen.
El narciso, la mira venir receloso,
pues hasta su retiro,
su belleza lucirá,
opaca, entristecida.

Emprende su partida,
tendrán que esperar
nueva alborada.
Para ver su damita preferida.