Satélite desconocido

Le dije:
—Puedo acercarte a las estrellas.
Pero la gravedad era más fuerte que nunca…
Caímos de golpe a la tierra.

Le dije:
—Quizás encajemos en este planeta.
—Quizás este planeta nos necesita.
—Si eso no basta,
juntos unificaremos todas las leyes físicas,

Me dijo:
—Tú no sabes nada de astronomía.
—No es un tema de gravedad, sino de velocidad.
—La teoría de cuerdas distorsiona tu realidad.

Me dijo:
—Soy una astrónoma aficionada.
—Quiero descubrir constelaciones desconocidas.
—Simplemente quiero irme luego del planeta tierra.

Le dije:
—Yo soy un astronauta aficionado.
—Quizás simplemente nos separan universos paralelos.
—Quizás solo somos dos rectas paralelas que jamás se interceptan.

Luego no me dijo nada,
simplemente se fue con un satélite desconocido.