Radiografía
...
¡Qué tragedia a la anterior tragedia está la de nosotros!
de no saber estar solos
de no saber morirse sin tomarse de las manos en el rincón
de la muerte
y en una habitación junta, ser la pareja primera
desclavándose los anillos en la pupila y en la médula
para cuando llegué el incendio no se consuma el labio
ni la palabra te amo, sino que se vaya por el largo hilo
esa interminable hazaña de ya no volver a ser unosolo
sino un nupcial roto, no repetido de sistema, un cántaro de agua
fósil
porque nosotros ya desde ayer no supimos como volver.
imaginar que poco basta para agendar el cuerpo con alguien más
imaginar cuanto tiempo uno puede estar muerto sin darse cuenta.
a mí que me quedaron pétalos y costillas que aún no amaste
y yo que te dejé inscritos dos libros y un poema en cada índice:
porque la piel mía ahora se refriega contra el hueso vacío
y tu mano no se frota ya contra mi idea viva de besarte unavezmás
pedazo de rama creciente en mi cavidad borracha
y pedazo de luna deslingada de la miel ya sin mí nicontigo.
porque no supimos ensamblarnos secretos en el movimiento
del otro, sabes?
todo lo que escribo y he escrito [y que no leerás seguramente]
es una radiografía de pasos de lo que fuimos y debimos seguir siendo.
Conoce más del autor de "Radiografía"