Pronto llegará la noche
PRONTO LLEGARÁ LA NOCHE
Al llegar la anochecida, por fin cae la oscuridad
¡Ah!, la muerte
aquella que me busca en vida,
su virtud, la paciencia
su defecto... yo.
Con ella juego a la luz del crepitar
cadavérica me observa, babeante al levitar
cual perdida de mis brazos fue mi dueña,
fue mi esposa.
Al crear oscuridad juego a suerte con la muerte
que vencida, me concede un viejo baile
con la novia cuán querida
y así pronto llegará, la llamada “al más allá”.
Elegante de tristeza bailo al son de su compás
¡Joven bella marfileña!
Esta noche, puedo amar una vez más.
Cadavérica la muerte, nos observa
poderosa entre los muertos
intocable de dureza en su túnica imperial,
bailaremos inocentes ¡vida y muerte!, tú y yo
y la luna suena fuera, una música nupcial
¿Puede ser romántica la muerte?
Dadme un beso mi señora,
y al unirse plateadas nuestras manos
seguiremos fuertemente enamorados.
Junto al alma de mi dueña, nace el alba
mi señora, es la muerte cual tu ama
y al librarse congeladas nuestras manos
sabed, ¡sabed bien quien os ama!
Dadme un beso apresurado
y así pronto marchará... la nombrada “al más allá”.
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