No te quedes


No te quedes…
Sin mirar hacia el cielo
y explorar cada una de las estrellas,
que parpadeantes insinúan algo del más allá,
C
La luna en su más esplendorosa fase,
a los enamorados cautiva con sus destellos
y así florece día a día el amor entre ellos,
con la brisa del alba en el semblante.
No te quedes…
Sin caminar descalzo en la arenilla.
mientras el sol se pone en el ocaso,
Oyendo el susurro del océano ruidoso,
Cuando las tortugas arriman a la orilla.
La espuma que envuelve los dedos de los pies,
Cuando el amor se irgue a dar un beso
Y así, entre sal y sol la pasión expreso,
al sentir los labios salobres.
No te quedes…
Esperando sin esperanza
Puesto que, el tiempo marcha fugazmente
Y el hoy debe ser eternamente
porque, toda una vida no te alcanza.
Para vivir cada momento,
Y percibir el perfume de las flores cada mañana,
el canto de las aves en tu ventana,
entonando una plegaria al firmamento.
No te quedes…
Sin sonreír
y al corazón hacer feliz…
Conoce más del autor de "No te quedes"