Lunes

Ese amor, en los pensamientos mudos,
a mis anchas, en el cuarto clausurado
el hielo inerte atrofia las gargantas ,
las mentiras de un rascacielos se conocen
en los suspiros de la primavera,
¿estás allí?.

¡Ya está hecho! hay ciclos que transcienden
a otoños marchitos y a heridas ciegas,
hay ciclos que evolucionan en viajes sobre

la hebra de una telaraña ,
muero y es de noche querida,
las angustias hieren al orgullo
sobre el tiempo que saluda la vida
y la muerte asecha en los montes íntimos,
¿tú no? .

Estaba dormido en el techo,
las palabras sonrojan al firmamento
ante la puesta nuestra que despide
los hechizos de un papel,
¿la sonrisa? ¿las lágrimas?
¿Qué confunde los hábitos de un esclavo
en el tiempo cuando asfixian los pecados?
ladrona de ira, de anclajes sollozos , de la nubla
que encierra almas atadas de pies y manos,
¿y tú?.

¿Amamos todo? Por desgracia
la fiesta flota sobre cruceros,
pero ¿ cuál rumbo?
tu voz sopla embriagando al viento de los mares grises,
tu piel lía laberintos de perdición
y la musa muerta de la luces caídas
llevan consigo tristeza y encanto en la oscuridad,
¿aún estás?

Ese amor, en los pensamientos mudos,
en la alfombra de sangre perenne ,
en las manos germinadas de heridas,
en el juicio de los corazones deshechos,
el amor es como un pecado,
la lujuria no liga nada adentro
ni los llameantes labios, ni las pesadas palabras,
la lujuria mora en el pastizal de las fieras sin cabezas.
¿estás aquí?

Soy un cuervo de lenta noche fúnebre,
no el que anida en las ramas sobre la luna,
ni el que revolotea sin pena en la ventana,
soy huérfano de la luz en los pantanos,
de los astros que los arrastra las olas en la oscuridad,
la lujuria y las mentiras se parecen de noche
y las lianas del amor entienden de deseos
y de pecados en los sueños perdidos,
¿tú?