“ La última loca”

“ La última loca”.

Cuentan q se baña con el rocío
de las madrugadas,
bendecida por la luna
y por luciérnagas confesada.
Jura ser reina
y de laureles corona,
el desdeño de sus rizos por los soles
coloreados.

Le ven consolar a los sauces
y colecciona en los bolsillos
de su vestido de lluvia,
polvorientos capullos rotos
por las alas maduras
q a la llegada de abril,
fisgonean entre las lotus.
Con la savia de abedules,
calma la sed de su garganta
y se mantiene insigne profana
de las cláusulas dictadas.
Aguarda por la tormenta
y por sus rayos es bautizada,
le danza al Dios del trueno
quien le libera de la condena,
de haber caminado hereje
por universos ajenos.
Fieras nocturnas y agazapadas,
Acompañan su inocencia trasnochada
y ella es feliz sorteando su suerte!
Canta, ríe, vuela y salta ...
Siente un mutismo abrazador
q su voz ha estrangulado,
es el aviso de Dios
q la hora cero se ha pronunciado.
Corre la loca despavorida,
implorando por su vida...
y entre el púrpura introspectivo
de un antiguo Jacarandá,
se cuelan rayos q le beben
toda su humanidad...
el lodo q viste sus pies
y las raíces bajo sus uñas,
permanecen paferradas- aún en el desdén-
al viejo tronco de Matusalén.
AC.