La copia feliz del edén

Con mi torpe mano
menguada de ciencias
comienzo estos versos
lleno de espanto.

Abre tus ojos hacia tu alma,
no esculpas;
un infierno para tus nietos.
-Siembra un árbol-

E

l recitar de las flores
el verde verbo de los campos,
el donaire revolotear de mariposas,
y esa fragancia que canta con la brisa.
Callan;
Como diamante en el fondo del mar,
como campana sin péndulo,
como residente de hueseras.

Lo criminal de las talas,
el fúnebre cortejo de los ríos,
el eterno fatigar de los suelo,
y ese israelita holocausto químico .

Lanzan;
como veleta de papel
como llama al viento,
como ambición mitigada.

Naturalistas, voceros, poetas
protestad, alzad la voz, tomad la pluma
y luchad para que vuestros campos sean;
"La copia feliz del edén"