JUVENTUD PEZ DE ORO
La juventud
pez de oro buceando sereno
en el iris lozano de la vida;
leche fresca de sonrisa extendida.
En tu sol,
escala la montaña alpinista;
es ciego temerario.
En tu espejo,
presto camina y corre y vuela,
hasta tocar
sus largas gabardinas
de sueños.
La juventud
Se recuesta en los cabellos ensortijados
de la impaciencia,
en su florero de plástico,
quiere atraparlo todo en un minuto pleno.
Sus tréboles ciegos
lo miran todo,
sus locos deseos
saltan como peces alocados del mar.
¡Ay, juventud!
deja la telaraña de la apatía,
vive tu momento, despierto.
¿Ves?, cofia se cuelga
de la rama de la imaginación y del ímpetu;
tus manzanos son siempre dulces higos.
¡Crea tu castillo de sueños, juventud!
Avanza al dintel de lo inesperado,
tu nación, de tus paraísos,
con la boca abierta
espera tus jugosos tomates.
Siembra rosas de bien
desde tu ventana digital.
¡No claudiques jamás!
Ayer vi un anciano,
de su boca, de su cuerpo, de sus manos,
chorreaba la juventud,
como sol de la mañana;
¡Cómo saboreaba la juventud
como un espumante Champán!
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados
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