Héroes Y Dioses

Queda patente que el mundo,
Es frágil e inclusive,
Decadente.
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De que los consejos,
Vuelan con aire de filosofía,
Los paganos y los herejes,
Disfrazando sus realidades,
Con creencias de costumbres,
Que en ocasiones,

Abarcan, años de mentiras,
Y le siguen,
Tantos de avaricia.
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A veces,
No tiemblo de la certidumbre,
De quien cree de algo,
Que es un ideario inculcado,
Pues mi creencia,
Ondea mi propia bandera,
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Pero si me tambaleo,
Con el que arenga y no transforma,
Sus discursos en acciones.
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O esas mundanos,
Que pretenden,
Que su eje central,
Es “el / ella” , “misma / mismo”.
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Ya que todos,
Debemos ser practicantes,
De su propia “simbiosis social”,
La cual es innata,
Es un propio, narcisismo interior.
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Que a lo largo de su vida,
La soledad y la incertidumbre,
Hacen acto de presencia,
Estando no este harto,
De dibujar su realidad,
Para tener mas adeptos,
Que atiendan a su verdad.
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He aquí,
La errata permanente,
De una sociedad inconsecuente,
Que quiere cambiar su mundo,
Incompletamente.
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Todos,
Deseamos y admiramos a los héroes,
Ascendiendo en “acciones”,
Y la verdad,
La vida siempre sera bella,
Simple, fácil y bella.
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Pero los “heroes”,
Juegan a ser “dioses”,
Y las “promesas”,
Descienden con nuestros “sudores”.