Eterna Noche

Oro negro que estampas el sombrío cénit
Metal fundido con los ataviados pecados del planeta
Reposas afligida en el regazo de la tesonera soledad
Amable huésped de robustas y adiposas cenizas
Celosa testigo de crepusculares y abyectas vigilias
Te llenas de Luna para arrancarles suspiros a los enamorados
Fiel tejedora de famélicos sueños que trotan por la ciudad
Siempre apareces trémula, cercana, íntima y valiente
Te posas vanidosa en los musculosos hombros del ocaso
Bravía caravana de esperanzas y deseos mutilados

Turbio tropel de lejanos e indómitos murmullos
briosa abuela de trasnochados bares y cantinas
Parchado costal de sendos y tortuosos amores prohibidos
¡Oh eterna noche que ardes en la cumbre del cielo!
¡Oh eterna noche que arropas al mar con tu opaca sábana!
Sígueme besando-como estudiante- con tu horizonte estrellado
Sigue arrullando con tus delicadas manos la humedad de mi insomnio
Sigue siendo la fiel y eterna compañera de mi cerril nostalgia…