Espiga de Nardo
preferíamos esa misa de las siete
y no llegar muy temprano
al irnos al jardín, era la mas popular
entre nosotros los jóvenes, salíamos de misa como en feliz romería
al kiosko nos dirigimos
del brazo caminábamos
de dos en dos, o en mas amigos
seguimos la regla muda
las chicas tomábamos una dirección
dábamos la vuelta al kiosko
con la ilusión y emoción
de ésos chicos
que al contrario caminaban
a las orillas se hallaban pequeños puestos de dulces
aguas frescas o empanadas
¡pero sobretodo, cubos repletos de flores
rosas, gladiolas o nardos!
los muchachos al pasar, escojían sus favoritas, caminando al contrario
buscaban ésa señorita a quien ofrecerle su flor y una tierna sonrisa
quizá también "¿señorita la acompaño?"
a mi madre le tocaron algunas de esas gladiolas que "creía" sus favoritas
tiras de bellos colores con boquitas abiertas que parecían campanitas
del brazo de su hermana predilecta
en la ronda ellas seguían
en un momento sintió, una mirada profunda que la seguía en su paseo
un instante después, sin voltear
ella a su lado, sabía que él ahí estaba
percibiendo un bello olor,de una flor llamada nardo
con dulzura y timidez, al voltear ella hacia él, se encontró con su mirada
y ésas palabras "¿señorita la acompañó?"
muchas memorias, mas nardos
en sus vidas se cruzaron
él murió entre sus brazos
clavándose ésa mirada y, prometiendo
mas nardos...
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