Dulce Bebita.

Pequeño universo de mi universo...
Trocito de carne de la carne mía y del hombre que a besos y caricias,
sembró en mi vientre las más sublime y tierna semilla.
Hija del amor...
Mi dulce bebita.

***

Heredaste un tanto el brillo de mis pupilas...
ese dejo de tristeza que siempre habita

en el fondo del océano de mis ojos
y el sol cálido-enmielado de tu abuelita.

El cabello, las narices y la boquita
-comisuras que parece que se disipan-
son legado de tu Padre, perla de oriente,
dátil fresco, flor del Líbano, incienso y mirra.

Casi un año cumples, casi, mi chamaquita!
Aun tienes dos manzanas en las mejillas.
Cuando duermes me pareces un lago en calma
y te arrullo en embeleso, acurrucadita.

Aun siento cual si fueses recién nacida.
Aun soy esa Aprendíz que, en el día a día
se alecciona en cada gesto de tu horizonte
y da gracias al buen Dios que ha de ser su guía .