Despedida.
Querida mujer de mi alma.
Hace tiempo te vi llegar y en ese instante sonreí, quise ser amable, atento, educado y sacar lo mejor de mi. Con tu forma tan feliz me atrapaste.
Después con mucha pena te he de confesar que te amé (notarás que omito todos los pasos previos:
tu belleza, tu inteligencia, tu risa escandalosa, tu aroma, tu todo)
Ayer alguien me contó que cuando hallas a una persona así; es porque en otra vida ya las has amado y, en la próxima vida, cuando se vuelven a encontrar, todo conspira para que se sigan amando.
¿Será cierto eso?
En realidad lo dudo pero, suena interesante.
Te he de decir que lo poco que pasó entre nosotros a pesar de todas mis negaciones; se quedó grabado en mis ojos, en mi boca, en mis oídos, en todo lo que tocaste de mí.
En realidad es fantástico saber que existe un ser que sea tan fácil de amar; con todos tus defectos, tus fantasmas, con todas las cosas que contradicen tus actos y tus pensamientos pero, así fue.
Y que bien que te encontré
Recuerdo tus palabras,
Esas que decían que no te dejara nunca y las mías que completaban que jamás lo haría.
Pero ahora es tiempo, he de dejar que las cosas fluyan, que se las lleve el tiempo.
Si, es contradictorio es amargo, es complejo.
Los besos que tenía guardados para los mejores momentos he decidido llevarlos en el bolsillo roto de la esperanza, les amarre lozas pesadas para que lleguen al fondo y se queden dentro.
¿Querrás saber las razones?
No lo creo pero; todas llevan tu nombre.
Camina, camina lento, pausado y con calma, pero jamás te detengas.
Sigue adelante y si me hallas, puedes pasar de largo, no te detengas, no preguntes, no supongas.
Tampoco pienses que no te quiero,
Es solo que he atendido tus palabras, tus señales, mis lecturas entre líneas y sobre todo tus amores.
Me quedo con tu gusto o sin el
Con tu sonrisa eterna, tu piel suave, tus ojos bellos del color de mi carne...
Extracto de "amor de un viejo"
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Ciudad de México 11/11/21
Adrián
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