Coronado tiempo
Somos un segundo
Somos este sonido del piano, que con solo una tecla
En sol en mayor definimos .
Un ruido.
Un silencio.
Somos un sonido en vastas aguas.
Somos furor de Dioses, vestidos de esclavos.
Atacåndonos sin ver los distintos potenciales.
S
Sombras y luces.
Alzando el golpeteo del corazón.
Hay sangre colorada como una llama de carbón.
Viviendo y
Muriendo.
Alojados en un cuerpo...
En un refugio perfecto y con un vencimiento en la etiqueta.
Somos esplendor del olimpo...
Irrazonables y santos.
La tierra Diosa de un Fausto
Nos da vueltas,como en una calesita de niños.
Somos todavía niños.
La tierra gira y gira como balón agitado
Relumbrando.
Sin embargo nosotros somos los que vamos prendìdos la balón.
Nos golpea de cara al orgullo
Y volvemos a rebotar
Y llegamos al cielo
Y volvemos a caer.
Con una mueca de sacerdocio en vivir.
Somos un segundo, fiėl tirón en la boca de un león.
Somos fieles a elegir
Un camino u otro
Pero aveces,lo que somos,se queda estático.
Somos nosotros los que estamos sumergidos
En vanidad.
Las palabras son y serán el vestir del tiempo
Coronando las cenizas.
Cada grano en el reloj de arena es una oración.
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