Así será

Le pedirás al viento que se lleve su recuerdo,
Al sol que te queme para confundir tu dolor,
A la lluvia que te ayude a ocultar tus lágrimas,
A la tierra que te toque los pies para volver a vivir.

A tu pecho que aguante un poco más,
A tus ojos que paren de escarbar ojeras,
A tus manos que dejen de perderse en el aire,
Y a tu estómago que por favor ya tenga hambre.

A

la cama que te deje libre por la mañana,
Al comedor que quite una silla porque sobra,
A la cocina que hoy descanse, no vas a usarla,
A la puerta que no se abra si llegan a tocarla.

A la calle le pedirás que pare con sus parejitas,
Al parque que se calle con su molesta alegría,
A las paradas de bus que no te recuerden nada,
Y a la cafetería que se aleje de ti y de tu vida.

Al teléfono le pedirás que de una señal de vida,
Al reloj que se apure, que ya no tarde tanto,
A la ventana que no deje entrar esperanzas,
Y al libro que ya no insista, que estás cansado.

A tus sueños que dejen de ser tan dulces,
A tus pesadillas que no sean tan crueles,
A tu insomnio que te mate de una vez,
A tu somnolencia que te devuelva la lucidez.

Y al final despertarás con lágrimas invisibles,
Con un susurro de dolor que le teme a los gatos,
Con una tristeza que se esconde de las flores,
Con un recuerdo que huye de las labores de hoy.

Y tus pasos vuelven a escucharse,
Y tus manos vuelven a saludar a la tinta,
Y tus ojos brillan con el amanecer,
Tu sonrisa te dirá que hoy estás mejor que ayer.