"Yo,en llamas"

Sentate.
Tengo que hablar con vos.

Ya era hora de traerte de vuelta.
No sabés todo el ruido
que tuve que callar
para mirarte a los ojos.

Ya era hora de castigarte
o felicitarte —

todavía no estoy decidido,
pero no sabés todo el camino
que anduve a ciegas.

Practicando preguntas justas,
palabras medidas.
No sabés el riesgo
al que me expongo
cada vez que el reloj
da otra vuelta.

Te ves tan distinto
a como te recordaba.

Tu sonrisa parece anclada,
veo el desgarro
en la carne de tus labios —
una forma un tanto titiritesca
de ser feliz.

Tus ojos, secos,
transfixiantes, amplios,
me hacen sentir
que no soy el foco.

Prestá atención.
Yo soy tu brújula.

Esos temblores en el cuerpo,
tu jadeo,
me dicen que venís corriendo.

Pero mirá tus pies:
prácticamente son huesos.

Quiero que me digas
qué le pasó a tu mundo,
qué te hizo esto.
Cuáles decisiones tomaste
para ser más libre
y te condenaste al infierno.

Solo te advierto:
no te niegues la culpa,
el fuego del ave fénix.
Ruego que puedas arder y consumirte
para dejar de ser esta marioneta.

Ardí toda la noche.
Al amanecer,
ya no estabas en mi espejo.