Vejez
Mirando sus manos arrugadas
sus manchas ya ajadas,
piensa en lo trabajado y luchado,
se las quedo mirando...
Cuantas horas de trabajo
cuanto tiempo pasado
cuanto hemos acariciado
somos viejos carajo!!
U
dibuja formas recorriendo su mano
sus ojos seguían el recorrido
sus venas se vaciaban, se empequeñecían, crecían, jugaba.
Levantó su mano y a contraluz
miró con detalle su mano, su piel
dio la vuelta a la mano una y otra vez,
qué curioso pensó, no parezco yo.
Se toco la cara pensando en lo que había cambiado
cómo se había transformado
después de tantos años,
ahora era un anciano.
jeje pensó,... y mi corazón no!!
el muy cabrón!! sigue latiendo a su son,
ve una minifalda y se altera
mira un paisaje y ante el asombro, ronronea.
Entró en casa y en un espejo se miró
el reflejo le dibujó una sonrisa
le acarició la mejilla
y un guiño coqueto le devolvió a la sonrisa.
No hay prisa!!
Àngels Almazán
05/02/2016
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