Tiempo implacable

Pienso en el tiempo que transcurre implacable.
¿Qué va quedando del año que termina?
Tiene los días contados, lo sabe,
sin embargo, en sus labios hay una sonrisa.
¿No la ves? Es casi imperceptible,
logró su cometido.
Cuando lo recibimos deseábamos que solo nos trajera amaneceres,
pero traía las tormentas escondidas.
Nos dio dosis de ambos a su antojo,
cual veneno y antídoto.

Esperamos el siguiente,
sin saber que antes de irse contará sus secretos al que llega.
Así es, una y otra vez, año tras año
y solo pienso en el tiempo que transcurre implacable.