RIQUEZAS VACÍAS, ALMAS LLENAS.

RIQUEZAS VACÍAS, ALMAS LLENAS

Hay almas vacías en un palacio dorado,
que cuentan monedas pero no abrazos.
Tienen tesoros que no son riqueza,
y en su soledad, la vida les pesa.

El dinero, frío, no abriga corazones,
ni compra sueños ni emociones.
La verdadera fortuna, tan esquiva y callada,

Construyen castillos con piedras preciosas,
y adornan su mundo con joyas ostentosas,
pero en el crepúsculo de su fría morada,
el eco del silencio es su única balada.

El dinero, tirano de corazones perdidos,
no cosecha sonrisas ni cura olvidos.
Es un espejismo en desiertos de anhelo,
un brillo fugaz, carente de cielo.

Porque la riqueza no es lo que reluce,
es la risa que brota y nunca se induce.
Es la mano que toca, el hombro que espera,
es el calor de la vida en su primavera.

Hay quienes son pobres en la abundancia,
sin un amor que los llene de gracia.
Porque el tesoro más puro, eterno y fecundo,
es hallar el alma que comparte tu mundo.

Selene Nocturna.