Para que la olvides
para que la olvides cerraré mis ojos,
frente a los lugares que nos vieron juntos.
guardaré mis penas en un cofre viejo,
pondré sus recuerdos lejos de este mundo.
para que la olvides morderé mis labios
si es que se me ocurre sin querer nombrarla,
borraré sus letras de mi abecedario,
para que ni en sueños vuelvas a llamarla.
c
que su amor fue alquimia que duró un instante,
que tan solo a un tonto, necio insuficiente,
puede seducir su trampa comediante.
échala al olvido y suelta las amarras,
piensa que en su historia nunca fuiste nada,
que el pasado solo son estelas de agua,
que a veces recuerda en su aburrida calma.
para que la olvides seré tan constante,
como cuando quise ser su amor eterno,
llevaré mi azul bohemia delirante,
si es preciso hasta el umbral del mismo infierno.
para que la olvides andaré despacio,
ligaré mi canto a nuevas ilusiones,
simplemente entrando vivo en un letargo,
dormiré cansado, errante de emociones.
roberto peiretti
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