Mi Alma

Tengo el alma partida
en pedazos tan pequeños
que estos se adhieren
a cada rincón de mi ser.

Llenos de empatía por mí,
reconociéndome como si nunca
me conociera, descubriendo cada
detalle que me hace única.
Que me hace a mí.

C

on el alma rota puedo vivir
y no nada más eso, puedo existir,
ubicándome en el universo,
sabiendo que dependo de mi para ello.

Cada ruptura hace que me mire en el espejo,
que vea atreves de mis ojos,
que me encuentre ahí,
cara a cara.

Duele reconocer que no sabía de mí
pero que tonta, ahora lo comprendo,
cada milímetro de mi cuerpo
lo conozco, lo veo, lo siento,
siempre ahí para mi.

Con el alma fragmentada
Me tengo a mi, no para curarla,
No para pegarla…

Con el alma fragmentada
me tengo a mí, así a mí.
Es como un parto lleno de dolor
de angustia, de miedo,
de llantos a gritos,
de querer morir en ese instante,
de sentir todo y a la vez nada, nada, nada…

Y al final lo tienes en tus manos
de ti para ti
nuevo, pulcro, puro, aceptándolo, amándolo.

Cada momento de mi vida
que me partieron el alma,
tuve pequeños partos
Y como todos me quedaron
Cada uno de ellos marcados.

Y al final…ahí esta, de mi para mi
admirando cada brillante ruptura
porque gracias a ello me encontré
aquí estoy
sin mas, sin menos.

Con el alma partida
mi alma se multiplica y entonces,
solo entonces,
viviré con mis diferentes versiones
estando completa para mi.