Lecho de muerte.

Tu mirada vacía y tu alma se envuelve con el velo de la muerte,
tu piel pálida y ya no hay nadie para detenerte,
No debería mirarte,
pero no puedo apartar mis ojos de otra parte,
tu cuerpo se enfría,
a medida que pasan los segundos,
mis heridas se abren como si hubieran sido cosidas con puntos...suspensivos,
y aún así te siento cerca mío.

Quiero despertar de este sueño maldito,

Ese pequeño beso que robaste,
sostuvo mi corazón y mi alma,
pero ahora sólo me persigues como un fantasma.

Mi memoria olvidada te trae de vuelta,
y en mi lecho de muerte tú serpas todo lo que vea,
puede que mi último suspiro se vaya con lo que quedó de mi vida,
puede que después de mi muerte no me recuerden más,
sino como un alma perdida,
y así el oxígeno se vaya de mis pulmones,
seguiré mi camino,
pero mi corazón se quedará contigo.