Las luciérnagas


Dos mil acres de un campo abierto,
esmalte cetrino que engalana
la estadía del silencio.
Los frutos del bosque
danzantes bajo la ventisca,
sobre la bóveda de la tarde perfumada.
Besando está el astro sol
a las copas tempranas del árbol de arce
El goce de la floresta infinito
adueñado de cada armónico latido;
bajo un resplandor de luciérnagas
abiertamente a la luz de oro.
La atmósfera de nubes gama,
que por algunos instantes acumula
los atributos simbólicos de la calma.
Abierto el camino del bosque de ninfas
he visto apenas un instante de nuevas melodías;
que viene a mí, en un estallido fresco
libre de toda esclavitud del miedo.
Ofrendas de un viaje entre gotas de dicha
dentro del paisaje natural de un verde abrigo.
Un retorno inesperado al hablar
del súbito aliento,
que estalla dentro de la fresca armonía.
Y descubrir entre el silencio
un recinto perfumado de respuesta:
-La voz de la Creación...
besando en su mensaje los ojos y con ello,
una guirnalda coronando de paz al corazón.
*
Fondo musical: Bear McCreary- Dance of the druids
Marzo 17, 2020
© 2020 Gabriella- La Dama Azul. Todos los derechos reservados.
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