Por hoy... sigamos

Tienes que darte cuenta que no puedes aferrarte a quién no quiere ni debe permanecer más a tu lado. Las cosas van y vienen, los hechos pesan más que las palabras y es por ello que te digo:
Por favor, no, no ahora; todo se calmó... tú seguiste, yo seguí y así debemos quedarnos. No pretendamos reparar aquello que un día se quebró y rompió, ya que las piezas restantes no son capaces de poder formar todo lo que una vez existió.
Solo ve, sigue... así como lo hiciste todo este tiempo. No te responsabilizo de todo el daño, dolor que lograste, y logras en mí... pues yo también soy culpable. La relación fue de ambos y por tanto ambos tuvimos la culpa, cada quien aportando un poco de daño en el otro de manera indirecta o directa.
Por hoy solo te pido...
Sigue, sigamos...