La única excepción

No se como llamarte: mujer voluptuosa o mujer incandescente.
no se, sólo se que con la espina de mil llagas es suficiente para un intelecto como el tuyo, Y no tanto para un corazón como el mío.
No se cuando llegaste, al atardecer o al cantar de las almas en pena.
no se, sólo se que tus palabras de hierro no hicieron caso omiso a tus ideas Y peor aún, a una personalidad como la mía.
No se cuanto te llegue a amar, no lo sé.
de hecho creo que nunca he llegado amar. desconozco ese concepto.
Pero lo que tengo seguro es que me rehusó a un arte como el tuyo, me rehusó a ir en contra de mi voluntad, me rehusó a la injusticia, me rehusó al sentimiento, y sobre todo... Me rehusó al masoquismo, pero cariño... tu eres la excepción.

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