La Silla Vacía

La silla vacía a mi lado tiene un problema.

Solo uno.

El problema no es la vista que tiene del sol atardeciendo en el mar , que con el reflejo en el agua brillaría su sonrisa.

El problema de la silla vacía no es que no esté cómoda , pero capaz le quedará un poco grande.

Pobrecita silla , ni se da cuenta del problema, lástima porque es uno fatal.

E

l remedio es fácil, imposible pero sensible. Tiene que ver con una forma de ser y un corazón que me pegó como un camión. Un vuelo y un precio.

Solo hay que sentarse y ahí está , no hay otra.

Cuando vuelva a solucionar ella va a estar para ayudar. Es un problema que tiene cada playa , y esperan que nos vaya.

La silla vacía no debe preocuparse , pronto venimos para sentarse.