Gitana de los Países Bajos

Gitana de los Países Bajos

A: Mónica, o a quien te toque ser hoy.

Decidí bajar de mi nube dócil, abrirme el caparazón
Decidí latir contigo, caminar a tu son, a tu baile gitano
Lograste abrirme las venas y que sangrara sin morir,
Que pariera verdades que estaban sin concebir aún;
Fuiste los canales de Ámsterdam, los puentes cortos, las bicicletas
Yo me deje reconocer en la tienda de flores; me deje asesinar por quienes buscaban mi silueta

Decidí mostrarte los mil nombres y los tantos cuerpos,
Enarbolé mi pasaporte vencido y el que dormía atento a la emergencia;
¡Ante ti fui un hombre común!
Lejos de los tiempos en que era conocido por mis muchos nombres,
Y por otros tantos cuerpos de mujer sacados de los burdeles.
Fui mercader, traficante, novicio al estilo vaticano, florista y ratón de ferretería
Por ti decidí volver a ser pirata cibernético, mayordomo, hombre ciego del Metro;
¡Nunca lo dije yo!
Solo deje creerte que no me conocías,
Cuando en realidad más de una vez fui el fantasma de alguien que aún vive.