Fruto maduro.

A esta altura de mi vida,
solo trato de ser y estar,
sin culpas, ni remordimientos,
y solo espero haber dejado
un sabor dulce en sus recuerdos.

Y he aprendido a aceptarme
y aceptar a los demás
en un gran por ciento,
pero no en un ciento por ciento.

Si te dijera que estoy hecho
de toda bondad, mentiría,
pues humano soy,
con sus defectos y virtudes.

Maduro como fruto maduro,
no se si he llegado como quise,
al máximo de mis colores,
solo he llegado
y espero brindar mis experiencias,
de la cual estoy henchido,
y estoy a punto de reventar.

Pues si mi carne
sirve de alimento
para nutrir a las jóvenes aves
que van y vienen,
y que esparzan la semilla.

Si dejé un buen recuerdo
en la tierra de sus corazones,
si aporté algo bueno a sus vidas,
mi lucha habrá tenido sentido.

Muchas veces he parecido
caer en el suelo y desaparecer,
pero he renacido varias veces,
en nueva planta,
primero débil y luego fuerte,
muchas veces en mi vida,
y a las malas experiencias,
las miro desde la madurez
lo vivido,
y nada me parece tanto.

Si puedo auxiliar,
si puedo ayudar,
contando lo que he vivido,
si a alguien le sirve
como respuesta o receta
para levantar sus ánimos,
bienvenido sea.

Quiero ser un fruto colorido,
cuya carne te nutra,
y te haga sentir bien.

Quiero que todo lo que salga de mi,
sea beneficioso y aprovechado.

He caído al suelo
para renacer de otra forma
diferente, varias veces,
y puedo sentirme entero.

He renacido en etapas
y renaceré una y otra vez,
hasta mi ultima etapa final.