Existes

Sé que existes,
te siento, respiro y
me duele el pecho,
las costillas,
una hermosa opresión,
un crujido de dientes y
ese eléctrico vacío,
sacudo las manos y
te escapas con el sudor frío.

S

é que existes,
cuando mi sombra
desaparece,
eres luminiscencia,
fulgor y rayo,
mis ojos tiemblan
y ahí estás,
nadie más lo puede negar,
no es mi delirio mental.

Sé que existes,
en el rito del desayuno,
tú eres infusión natural y
pan con dulce de leche,
y yo soy más tradicional,
con el café,
de mis ojos en el sorbete
interminable de tu sonrisa,
entonces toca soñar.

Sé que existes,
en el tránsito
como guía satélital y
la compañía de tu mirar,
el acento firme
y las risas ni hablar,
cuando llegar importa
más por el viaje y
ahí sé que estás.

Sé que existes,
cuando aún el sol
espera para entrar y
el viento se hace alado
como un beso,
la tarde me espera
contigo en casa y
tantas risas por recordar,
tomados de la mano.

Sé que existes,
cuando somos más nuestros
y la noche nos besa
un millón de veces,
llenos de mimos y alegrías,
nos entregamos al olvido de la piel
y somos alma en cada caricia,
pegaditos hacemos
una vida hecha de pedacitos.