EL TRIPULANTE

Soy el único tripulante de esta nave
aquí las cosas no están del todo bien
el Gran Jefe me a enviado a una misión muy importante
y espero cumplirla a cabalidad

El espacio esta muy reducido
e tenido que hacer a un lado unos aparatos y sistemas de navegación
no tengo buena visión
apenas logró ver algunas luces
lo que funciona a la perfección es el sistema de sonido

A veces escucho las voces de los
que deben de ser mis contactos
al otro lado de la línea
allá donde nunca había imaginado llegar
aun no entiendo el lenguaje
pero sus voces suenan muy acogedoras

Les habla el tripulante..
Me pueden oír?
Y me contesta una voz dulce y suave
una voz que ya aprendí a diferenciar

Por momentos me aburre esta soledad
este viaje se está haciendo muy incómodo
la presión del exterior está apretando
cada vez más el fuselaje de mi nave
parece que todo a mi alrededor se encoge

Yo intento descansar y soñar
y sueño que conoceré mundos nuevos de los que solo oí hablar al Gran Jefe

Ya perdí la cuenta de los días que van
son más de ocho meses de viaje
estoy teniendo problemas
no logro comunicarme con mi base
los suministros se han acabado
la nave ésta en muy malas condiciones
tengo miedo, mucho miedo
no se si lograré sobrevivir más tiempo aquí dentro

Estoy enviando señales de auxilio
creo que son mis horas más difíciles
tendré que hacer una maniobra de emergencia
la nave está perdiendo fluidos
y todos los sistemas han colapsado
nada funciona ya

Escucho mucho ruido en el exterior
creo que la nave a estallado
tendré que salir al exterior
por una fisura que se a abierto en el fuselaje

No tengo traje protector y esa atmósfera
es muy distinta de la que respiro
creo que no sobrevivire.

Bitácora del tripulante :

Hoy es el primer día después de mi gran viaje,lo logre,logré sobrevivir.
Ya hice contacto con los seres que me esperaban aunque no hablo el mismo idioma me entienden
Me dijeron que me guiarán en la continuación de mi viaje.
Te envió este mensaje porque se que tú me escuchas en donde yo esté.
Hasta pronto querido Gran Jefe, o Dios, como aquí te llaman.