El tiempo cura a su tiempo
Quién supiese cuál será el final de una tormenta,
quién supiese cuándo se acaba el dolor,
dicen que el tiempo...
dicen el viento,
y luego... te sujetas al Sol.
Sin pensar en otra escapadita al vaivén del péndulo,
luego caen lágrimas,
después te saluda el temor;
él se queda si quieres
no dejes que te lleve a la desilusión.
Nadie sabe cuánto tiempo dura
y si alguien lo supiese no me diga por favor,
que entre las nubes cargadas
de gotas de lluvia apagadas,
entremedio de eso...
el arcoíris se demora en dar a luz.
Se demorará meses y años
¡decadas!
estoy esperando sin temblar,
con mis manos tibias de tristeza,
aún sostengo la sonrisa
que vino al pasar.
Pues si pudiese yo desgarrarme,
para soltarla un poco más...
Si pudiese exprimirla,
para derretirla
¡para de pensar!
Más quise yo que olvidarla
pero sé que soy incapaz,
incapaz de no aferrarme a los camino del tiempo
que aunque se de su tiempo...
o se de su momento...
Sé que la tormenta pasará.
Porque pasajero es el sentimiento,
sea negativo o positivo su andar
y aunque sola este al comienzo
entre tanto cambio y proceso...
sola debo remar.
Remar a la sanación de mis tormentos,
miedos, e inseguridad
que pese al clima o pese al verso
¡Sonría! me dicen las voces del mar.
Y aunque me lo gritará una piedra
yo hubiese preferido sonreír,
porque da igual quien lo diga
si lo sientes,
estás sanando...
Y el tiempo
se encargó de tí.
POEMA POR JAVIERA OSORIO JIMÉNEZ
© Derechos Reservados.
Viernes 23 de Marzo del 2018.
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