El Jardinero

2017 Feb 26
Poema Escrito por
María del Rocío

El solo sonido de tu risa
a mi ser
convierte en espasmo,
y las rosas a tu paso se marchitan.
El soplo del viento,
receloso
no comparte de tu encanto,
y alza tu vestido para robarte caricias.
Yo, con flores en mis manos,
antes, de tanta belleza hoy,

exiguas me parecen.
Afásico y atrofiado en mi sitio
permanezco, ajena cada mañana
vas matándome de a poco.
Más, gozo hasta el delirio
de tu paseo rutinario.
Tus afables ojos posas en azaleas
y gladiolas, cierras tus ojos,
escuchas, las avecillas tempranas.
Jamás, a mi lado miras.
Yo te observo, bebo,
de tu candencia, la elegancia
de tus pasos.
Mis manos duelen, por palpar
tu blanco cuello.
Y mis labios, por algún beso robarte.
Más permaneces ajena,
a mis súplicas sin habla,
a mis ansías silenciosas,
a mis miradas que llaman.
¡Cruel mujer, criatura amada,
todo el jardín te reclama!
Como quisiera ser árbol y a mi
sombra te acercaras,
o ser el agua de la fuente donde
tus delicados labios pasas.
Deseo ser la húmeda tierra,
que tus
píes descalzos gozan.
!Mujer como sufre mi ser,
más, mi sufrir
no lo cambio solo por verte de paso!

2017 Feb 26

María del Rocío
Desde 2015 Jul 29

Conoce más del autor de "El Jardinero "