Cuestión de abejas

El zángano y la reina volando van,
en lo alto de las montañas el amor conocerán.
Quieren formar una colmena,
aunque jamás se volverán a mirar.
Zumbado su amor por un segundo,
sus cuerpos unirán.
Mentirosa reina,
con uno y otro estará,
al primero olvidará.
ni su aleteo recordará.

Pero se sacrifica,
para la vida en la tierra preservar.
Después, ver nacer flores,
frutos, colores,
ver el amor brotar.
Tomarán ese néctar,
para la colmena estructurar.
Y sus roles que el destino no cambiará.
Que si naciste para ser obrera,
obrera serás.
En el trabajo comunitario,
fieles siempre creerán.
Nodrizas, limpiadoras, pecoreadoras,
recolectoras y constructoras,
su vida jamás se detendrá.
Por eso el zángano y la reina,
se van a enamorar,
para que nazcan las flores y los frutos,
que al final,
la vida es un zumbido,
que deben perpetuar.