¿Cómo empiezo?

Me carcome,
Me consume,
Me destruye la idea de solo pensarlo.
Tendría que dejar de pensarlo,
dejar de pensar y empezar a hacer.

¿Pero cómo?
¿Cómo empiezo?
¿Hola, cómo estás?
Puede ser…

S

iempre me costó empezar,
nunca supe cómo hacerlo,
ni cuándo ni dónde.
Siempre lo imaginaba.
Se veía bien.

Unas conversaciones simples,
Algunas boludeces acá,
otras allá y así.
Todo lindo, pero no.
No me sale hacerlo.
Y encima, las pocas conversaciones
que logro empezar terminan con un
frio y doliente –“Todo bien”-.

Conversaciones cortas.
Vacías de todo, y llenas de nada.
Todo eso me hace pensar,
Mientras me ahogo en cigarrillos
ya no tan baratos, ¿como seria?.
¿Cómo sería qué? Me pregunto.

¿Cómo hubiese sido?
Me atormento a mí mismo
con solo pensarlo.
Pero me atormenta más el cómo
sería si decido hacer algo ahora.
¿Sera tarde ya? ¿Todavía podré hacer algo?
Eso es lo que hoy más me atormenta.