Chile

Si vieras cómo me pongo
cada vez que
escribo
escribo y estoy acá

Cada vez que
escucho
degollo
y me dejó degollar

H

e estado semanas
sin poderme inspirar
o tal vez
Sin
poder hablar

La poesía no llega a una siempre
ni de las mil formas que una quisiera
ni como lo soñó
ni como fue,
simplemente es

Y hay cosas
cosas
que parten
TANTO
el corazón...que
A veces no se pueden,
hablar,
ver,
tocar

No sabía...no sabía cómo hablar,
Cómo hablar?
En esta época.
En donde todo mal...
donde se dice que Chile,
sí,
mi Chile,
nuestro Shile.

Está surgiendo...está despertando
y cuanto más
Hay gente alegre en las plazas
festejando la revolución
y tomando una que otra cervezas,
no los culpo
está bien,
no los culpo
La revolución nos hace bien.

Pero cuántos más....
cuánto
que les ha costado la vida
estar acá

Que les ha costado la vida...
una vida entera
luchar,
dejar familias.

Dime,
qué se sentirá que a tu padre/madre/amigo/hermana/
Lo maten?
Y no lo dejen escapar?

Lo maten
La maten
Y no te den su cuerpo
Ni lo puedas mirar,
ni darle un último adiós

Digo, Dios (o por decir una deidad)
puede haber tanta maldad
tanta incredulidad
tanta poca empatía en esta sociedad

Se puede ser capaz
de causar tanto
TANTO
dolor ajeno?

De no tener compasión?
DE NO TENER DOLENCIA?

De no pensar...y si fuera
mi hijo/tu hija/tu esposa/tu mamá

Dime,
cómo no puedes ser capaz
de ponerte un momento
en lugar de otro
taparte los ojos
y jalar del gatillo
e ir a tu guerra
tirar tus bombas
tirar las lacrimógenas

Producir llanto, dolor,
rabia, ira,
desesperación

Y encima...ser capaces
de seguir diciendo que
la culpa es del otro?

Dime,
hasta cuándo Chile,
hasta cuándo Sebastián,
vamos a asumir que la culpa
es de quien la paga

Y que, en realidad,
no existe la culpa,
sino que una muy mala mirada
de poder mirarse hacia dentro
y decir
y con honor

como pecas
pagas.