Cerezo en Flor

Era un cerezo en flor. ¿Te acuerdas? Estábamos bajo él, nos daba un poco de sombra. Tocaste mi labio inferior con tu pulgar, me sentí seguro.
El río fluía levemente, estábamos cerca de la canícula de enero.
Nos acostamos bajo el cerezo en flor. Solo quería abrazarte, no quería que nos moviéramos de ahí.
Fue una de las semanas más bellas que jamás había tenido, sino la más. Debí haber pasado más tiempo contigo, besado, abrazado. Mei almus es.
Parece que para ti fue reciente, yo hace más de uno año ya te amaba.
Tuvimos varios inconvenientes, pero pudimos superarlos. Tuve que mentir mucho para salir junto a ti, incluso en un impulso desesperado tuve que contarle a alguien.
Ahora tu estás allá y yo acá quien sabe dónde, mi corazón está contigo. Tecum felix sum.
Intenté hacerte feliz lo más que pude durante esa semana.
Me prometiste que nunca la olvidarías, ni a mí. El consuelo más grande que jamás alguien me pudo haber dado, alguien más que tú.
Ojalá esa semana del cerezo en flor pudiera volver.