Amor en el tiempo
Cuando entro en la penumbra
de la habitación del hotel,
me siento capturado por tu estilo,
devorado por tus sentidos.
Mi mente vuela lejos,
mientras lentamente te desvistes,
con esa mirada que insiste,
que me deja perplejo.
Y mientras la ropa cae al suelo,
no encuentro respuestas,
eres tan bella, eres lo que anhelo.
Porque no me aburro de verte,
los años no pasan sobre
lo que sentimos,
somos todo lo que queremos.
No pierdes el tiempo
es como si no hubiese mañana,
cómo una bella dama solitaria,
rodeada de cientos de caricias,
tu voz es una andanada,
de deseos y canciones armada.
Entre brazos enciendes el radio,
tu estación de rock suena,
y no sientes ninguna pena,
en sentirte desnuda en un estadio.
El tiempo pasa,
nosotros no lo sentimos,
jugamos al amor, en amantes
nos convertimos,
ardemos con el diablo,
en su misma braza.
Cabernet sauvignon,
el vino aviva la llama,
lejos de apagarse la pasión,
se devela el alma.
Se nos fue la tarde,
te has dormido,
a tu bello cuerpo el cansancio
ha rendido,
mientras alisaba tu pelo,
es como una pintura de Monet
que impresiona en todo sentido.
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