Alucinando

El espejo de tu alma,
claramente refleja el oculto deseo,
que alberga tu corazón.

Tus caricias, escriben en mi ser,
ese fino placer de no dejar terminar,
la magia de tus encantos.

Cual frenesí que destaca,
la sonrisa en tu rostro,

alimento para los enamorados,
que nutre a las almas vacías.

No tardes, embriagarme con tu amor.
Que tus palabras no sean efímeras,
ya que mi voz no se silencia,
para decir que eres visible ante mi ser.

No eres un espejismo,
No estás en el oasis,
eres verdad.

Eres la luz que abrillanta
la claridad de mis ánimos,
al encontrar en tu dulce boca,
la dulzura.

Gracias amor,
porque no eres una alucinación,
eres real y estás aquí,
junto a mí.

Para darnos el amor,
que tanto anhelamos.