Abuelos que no tendre
Al bajar las escaleras ya le duelen las rodillas
cuando mira a su mujer ya no ve ha aquella chiquilla
la luz al final del tunel, el reposo del guerrero
los domingos ya son lunes, el baston junto al sombrero
La experiencia acumulada que no te regala vidas
las pastillas, los entierros, los amigos en su huida
el reloj que ya no anda, los numeros que no suman
el pajaro ya no canta, las certezas se hacen dudas
L
la vista ya fatigada que va tendiendo su velo
esas manos temblorosas que se llevan a la boca
la erosion de las mareas que han desgastado la roca
Los silencios, los misterios, los recuerdos escondidos
la sensacion de impotencia cuando nos llega el olvido
el traspaso de poderes la dejacion de funciones
el querer ya descansar en eternas vacaciones
La lagrima ya no brota, se seco la fuente eterna
se apagaron los faroles, ya no enciende la linterna
el corazon no bombea por la falta de emociones
se olvidaron ya las letras de las hermosas canciones
Los años que van cayendo, como hojas de almanaque
y los pequeños despistes se han convertido en achaques
el ruido se vuelve ajeno y la lluvia nos resbala
la soledad de la guerra cuando se acaban las balas
Los consejos de los hijos, las preguntas de los nietos
el otoño permanente con las hojas en el suelo
esas historias liadas, al fuego de alguna lumbre
presumir de honestidad y de muy buenas costumbres
Abuelos que nunca tuve y no pude disfrutar
envidias ya superadas al ver a otros contar
bendicion del ser humano de compartir en reuniones
homenaje siempre eterno a todos nuestros mayores.
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