Versos A La Carta 2º Parte

Conduce mi corazón,
A través de esta noche,
Dejando que las farolas,
Iluminen mi cara,
Mientras voy de copiloto.
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Estas tan bizca,
Que ni teniendo gafas,
Ves lo que tienes frente a tu cara.
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Túnel infinito,
Que alejada veo tu salida,
Pero que cerca,
Siempre tú de mi vista.
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Las lágrimas se forman,
Encima de tus propias ojeras,
Van uniéndose poco a poco,
Hasta juntarse en una,
Cayendo, al vacío de tu rostro,
Cayendo, cayendo, cayendo.
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La soledad es una bestia,
Que solo sale de su caverna,
Si su víctima lo deja.
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Vuestras miradas me petrifican,
Mientras camino, por pasos marmoleantes,
Vuestras miradas me sentencian,
Sigo siendo piedra caliza.
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Y a veces,
El mundo me come a mí.
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La hoguera con sus flamas,
Licuan el rímel de mis ojos,
Y así mis lágrimas,
Se vuelven negras,
Como el infierno,
Que aun habito.
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Opresión obstinada,
Del acompañamiento nocturno,
Solo de noche os veo como perros,
Enjaulados,
Encarcelados.
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A veces,
Somos paradigmas de nosotros mismos,
Y los enigmas,
Son los que aprueban,
Nuestros aciertos o nuestros errores.
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La lluvia puede borrar,
Los rastros, las marcas,
De mi dolor y del dolor ajeno,
Pero y nuestra mente,
Quien o que,
Sellara nuestra mente.
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La nada,
Es más que nada.
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