UNA MIRADA AL MIEDO

El miedo nos va enterrando en vida
haciéndonos cavar nuestra propia fosa
sepultando la cosas más queridas.
-Miedo a lo que ya pasó.
-Miedo a lo que pueda pasar.
-Miedo a tener miedo.

El miedo te atrapa en sus telarañas
inmovilizando todo tu ser
llenado de inquietudes tus entrañas.

-Miedo a la oscuridad.
-Miedo a ser cegados por la luz.
-Miedo a la propia vida.

El miedo es la antítesis del amor
que nos abochorna con culpas y culpables
llenando la existencia de lacerante dolor.
-Miedo a amar sin ser amado.
-Miedo a dejarse llevar.
-Miedo a no estar a la altura.

El miedo es una pesada mochila
que no sabemos donde dejar
siendo una carga que siempre vacila.
-Miedo a lo que digan los demás.
-Miedo a lo que puedan pensar.
-Miedo a los que te producen miedo.

El miedo nos enseña un camino
que no estamos obligados a coger
e intenta manipular nuestro destino.
-Miedo a la enfermedad y la muerte.
-Miedo a una decrépita vejez.
-Miedo a la soledad absoluta.

El miedo lo vamos alimentando día a día
como a una mascota que acogimos sin sentido
para terminar hipnotizados en su triste melodía.
-Miedo a un Dios todopoderoso.
-Miedo a un tétrico infierno.
-Miedo a que no exista nada después.

El miedo aparenta tener muchas caras
y mil brazos que te amenazan
con atrapar todo lo que más amaras.
-Miedo a decir lo que piensas.
-Miedo a sentir lo que sientes.
-Miedo a escoger un camino.

El miedo nos va atrapando lentamente
hasta hacernos sentir inmovilizados
embaucados por el juego de la mente.
-Miedo a la depresión y tristeza.
-Miedo a poder ser feliz.
-Miedo a conocer mi interior.

El miedo es maestro del sufrimiento
que te corroe como vil carcoma
azotándote con múltiples padecimientos.
-Miedo a vivir en vano.
-Miedo a morir en vano.
-Miedo a escribir en vano.

No pretendo alentar los temores
en mi queridos lectores,
solo quiero aprender si puedo
de todo aquello que nos da miedo.