A TRANCA ABIERTA

Me preguntas si te quiero...
Cuando después de tanto,
a pampa abierta galopaba en desenfreno,
recordando el casco en hierba,
libre de herradura y de herrero;
a voluntad de galope,
sin rienda ni estribero
Me preguntas si te quiero,
habiendo conocido el ardor quemante de la yerra en el cuero,
pintaba en rojo mis brazuelos,
el puño alzado,
que amainó en mi rebeldía
cualquier amago de revuelo
Me preguntas si te quiero,
Si después de tanto,
al fin, no veo cerco en el potrero...
La tranca está abierta,
las voces se oyen lejos,
me perdió de vista el campero.
El viento corre en contra,
y aunque los azuzen,
no me encuentran ni los perros
Es mío el aire, la tierra y el cielo,
Los montes, los charcos
y, por fin,
mi vida; mis sueños.
De nuevo siento adentro el brío que crece,
mi espíritu apaleado,
de pronto, se estremece...
Entre medio de la niebla,
la figura serena de tu cuerpo, aparece...
Preguntando, si te quiero...
Y mis piernas,
mi corazón desbocado,
mis ansias de mundo,
se aflojan, se adormecen...
Ante mi, los eternos prados verdes me llaman a gritos,
mi alma otra vez se hace brasero,
Pero te acercas, suavemente,
me hablas calmo,
y susurrando,
me preguntas si te quiero
MVEBL

Conoce más del autor de "A TRANCA ABIERTA"